Mañana nuestras chicas del voley debutarán en el Mundial Japón 2010, teniéndonos a los peruanos con el control remoto a buen recaudo.
Cuando era niña recuerdo el televisor entonando el voley cada domingo por la tarde. Yo nunca lo jugué pues mis diminutas muñecas no soportaban el fuerte juego que este exige. Lo mio iba por otros donde sí tenía la destreza y la pasión de practicar. Pero de ver... Qué peruano no la tiene de vivir el voley nacional, el cual nos dio tantas alegrías.
El voley peruano tiene un no se qué. Deporte familiero, enraizado en nuestra memoria y en nuestros genes. Toda abuelita le habla a su nieto del voley nacional y así en seguidilla, por ello nos fluye tan incondicional por el torrente.
Mañana debuta nuestra selección en un grupo fuerte. Sé que no la tendrá fácil, pero a diferencia de otros deportes donde los jugadores celebran con "rucas" y trago sus derrotas, ellas llevan la esperanza de triunfo en base a sacrificio, amor y disciplina. Así, ¿cómo no nos van a comprar?
Éxitos chicas. Estaremos alentándolas una vez más.
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